Comportamiento de una persona recién divorciada cuando tiene que regresar a la casa de sus Padres
Dependerá de la personalidad de cada ser humano, el estado anímico y la relación que tenga con sus Padres, para determinar el estado emocional que se producirá al reconocer que tendrá que vivir nuevamente con sus progenitores, para algunos será un alivio y se sentirán reconfortados para el mal momento que están viviendo, para otros será una situación de caos ya que a parte de sentirse frustrados por la separación también se sentirán derrotados por tener que regresar a casa de sus Padres pensando que fallaron.
Socialmente la mujer se ve más afectada por las opiniones externas con las que se siente desvalorizada, fracasada en algo que creyó que era para siempre y ahora regresar a casa de los Padres la lleva a pensar que no sabe elegir su vida correctamente, incluso ciertos Padres influyen en crear y reforzar este pensamiento recalcándole su "mala" decisión.
El hombre se ve afectado en la medida de que quiso a la persona con la que se casó pero no resultó y regresar a casa de los Padres lo desestabiliza pero en cierto modo logra encontrar una cierta independencia en donde no es totalmente controlado por los Padres y vive de manera más libre.
